lunes, agosto 14, 2006

Ya nada nos sorprende...

La verdad es que en este país, nación, estado plurinacional o como quieran llamarlo ahora, estamos tan aborregados, tan sumamente adoctrinados, que ya no hay nada que nos sorprenda.

No nos sorprendimos cuando desaparecieron de golpe todos aquellos del "queremos saber" (cuando aún no se habían sentado en el sillón los nuevos ministros), ni los ultra-ecologistas cuando ardió Guadalajara (antes lo había hecho Huelva), ni vimos a familiares de nuestros valientes soldados muertos en el extranjero corriendo por los pasillos increpando a ministros, ni los defensores de nuestro vecino mojamé decir ni esta boca es mía cuando éste abandonaba a los inmigrantes en el desierto para morir, etc, etc, etc...

Claro, ahora tampoco nos sorprende, como dice Girauta:
No nos sorprende que la plataforma Nunca Mais, o sus restos pestilentes,
lleguen en auxilio del negligente gobierno gallego, rojo como los extintores
pero incapaz de extinguir nada que no sea la esperanza de que cumplan con
sus obligaciones. Es a ellos a quienes se les está quemando Galicia. Por
inútiles, por rescindir sus acuerdos con el ejército, por despedir a los
máximos expertos en lucha contra el fuego, por su incapacidad para responder
en el momento y de la manera que debían, por no coordinar bien los
efectivos, por no solicitar ayuda, por no dotar recursos y por exigir
certificados oficiales de gallego a quienes, por cierto, no hablan otra
cosa. Lerdos viles; primero echan por la cara a quienes necesitaban y luego
les atribuyen los incendios.